Más que nunca, la adversidad es un tema candente en este momento. En nuestro panorama económico, político y social actual, se siente la adversidad en grados que realmente no habíamos presenciado antes. Y mientras que la mayoría de las personas podría verlo como algo negativo, yo lo veo como una plataforma de lanzamiento para desarrollar un ingrediente que falta en la cultura de liderazgo de hoy: la resiliencia.
Los líderes no solo necesitan poseer resiliencia para sí mismos, sino que deben demostrarla ante sus equipos. A menos que podamos superar juntos los tiempos difíciles y los contratiempos, no podremos liderar de manera eficiente en el escenario actual. Aunque los líderes tienden a amar los desafíos y pueden sentirse motivados por ellos, ¿cómo desarrollamos la resiliencia como resultado?
La adversidad puede servir como catalizador para obligarnos a adaptarnos al cambio, superar obstáculos, liderar con el ejemplo, mantener el enfoque, generar confianza y manejar el estrés. Cuando eliges intencionalmente enfrentar la adversidad con una mentalidad de crecimiento, la resiliencia se desarrollará. Si eliges enfrentar la adversidad con una mentalidad fija, en cambio se desarrollará un liderazgo inseguro.
Cuando enfrento circunstancias adversas, mi tendencia natural es a mostrar frustración, irritabilidad e inseguridad, y enfocarme en lo inconveniente que es para mí. Esta mentalidad fija no me hace crecer como líder, sino que me hace retroceder y me vuelve ineficaz (e incluso irrelevante). Pero cuando me detengo y elijo tener una mentalidad de crecimiento, desarrollo determinación y fortaleza; soy capaz de ver las áreas de crecimiento personal y corporativo que pueden ocurrir.
Más importante aún, esto construye una base de resiliencia para el próximo revés. La próxima vez que la adversidad aparezca (porque seamos honestos, sucederá), puedo mirar hacia atrás y ver cómo mi equipo y yo crecimos la última vez, y eso cambia mi perspectiva, así como mi plan de ataque.
Los líderes resilientes ven los tiempos de adversidad como oportunidades de aprendizaje a aprovechar en lugar de minas terrestres que evitar. Cuando los líderes cometen errores, usamos esa experiencia para mejorar nuestras habilidades y ayudarnos a evitar esos errores en el futuro. Y a medida que aprendes de ellos, te vuelves más resiliente.
Una mentalidad de crecimiento en tiempos difíciles nos ayuda a enfrentar desafíos, comprender y superar contratiempos, y desarrollar una actitud positiva. Nos permite mantenernos motivados y nos ayuda a soportar –pero no solo a soportar… nos ayuda a soportar con dirección. Y resiliencia.
Chris Goede, vicepresidente de Maxwell Leadership, es un líder experimentado, comunicador y coach con una impresionante trayectoria de más de dos décadas. Con una rica historia de creación, crecimiento y liderazgo de empresas, Chris es una fuerza transformadora en el ámbito del desarrollo del liderazgo y la formación de equipos de alto rendimiento.