Según un estudio reciente, se prevé que el comercio social alcance los 1,2 billones de dólares para el año 2025.
Las compras están experimentando una “revolución social”, según un nuevo estudio de Accenture. Se prevé que el comercio social -las compras que tienen lugar desde el descubrimiento del producto hasta la compra en una plataforma de medios sociales- crezca tres veces más rápido que el comercio electrónico tradicional en los próximos tres años. Para 2025, se espera que el sector del comercio social mundial, de 492.000 millones de dólares, esté valorado en 1,2 billones de dólares.
“La pandemia demostró hasta qué punto la gente utiliza las plataformas sociales como punto de entrada para todo lo que hace en línea: noticias, entretenimiento y comunicación”, dijo Robin Murdoch, líder global de la industria de Software y Plataformas de Accenture. “El aumento constante del tiempo dedicado a las redes sociales refleja lo esenciales que son estas plataformas en nuestra vida diaria. Están remodelando la forma en que la gente compra y vende, lo que proporciona a las plataformas y a las marcas nuevas oportunidades para las experiencias de los usuarios y las fuentes de ingresos.”
El motor de este crecimiento son los usuarios de las redes sociales pertenecientes a la generación Z y a la generación del milenio, que se prevé que representen el 62% del gasto mundial en comercio social para 2025.
Los compradores sociales citan la lealtad como un factor clave en sus decisiones de compra, y el 63% dijo que son más propensos a repetir las compras del mismo vendedor de nuevo. Esto coincide con el sentimiento de la mitad de los participantes en la encuesta, que afirman que la falta de confianza en la autenticidad de los vendedores sociales y las malas políticas de devolución son su mayor barrera para adoptar este método de comercio.
“El comercio social es una fuerza de nivelación impulsada por la creatividad, el ingenio y el poder de las personas”, afirma Oliver Wright, director mundial de Bienes y Servicios de Consumo de Accenture. “Da poder a las marcas más pequeñas y a los individuos y hace que las grandes marcas se replanteen su relevancia para un mercado de millones de individuos. Para que el comercio social funcione correctamente, los creadores, los distribuidores y las marcas deben llevar sus productos y servicios allí donde está y estará el consumidor, y no al revés. Significa trabajar juntos en un ecosistema dinámico de plataformas, mercados, medios sociales y personas influyentes para compartir datos, conocimientos y capacidades para ofrecer los incentivos adecuados y la mejor experiencia del consumidor en un mercado digital integrado”.
La mayoría de los usuarios de las redes sociales encuestados (64%) afirmaron haber realizado una compra a través del comercio social en el último año, datos que reflejan una cifra ya estimada de 2.000 millones de compradores sociales en todo el mundo. El informe indica que para 2025, el 18% de todas las compras de comercio social serán de ropa, pero la belleza y el cuidado personal también serán un atractivo importante, con una previsión del 40% del gasto digital en mercados clave para 2025.